Encaró el micrófono con soltura en el medio de un patio eterno, flanqueado por plátanos gigantescos, y frente a una fila inmóvil de gendarmes, prefectos y policías federales ordenó formalmente el retiro de tropas de la ciudad de Rosario. Y lo hizo en jeans y zapatillas de trekking, en abierto contraste con tantos uniformes y trajes alrededor. El secretario de Seguridad nacional, Sergio Berni, repasó la situación tras el paso de Gendarmería y criticó fuerte al socialista Hermes Binner porque cuando fue gobernador “hizo caso omiso de nuestras advertencias acerca de la corrupción de la policía con el narcotráfico”, afirmó.

Berni atribuyó como origen principal de la inseguridad que hoy asuela Rosario al “delito común”. 

-”¿Cómo? ¿Y el narcotráfico?”, se le preguntó en rueda de prensa.

- Ese fue el comienzo, hoy la violencia está desbordada y expresada en todo plano, es un problema ya de delincuencia. Y claro que la génesis fue el avance del narcotráfico y la autonomía de la policía en este tema. Se lo advertimos al gobernador Binner y no quiso atender lo que le avisábamos. Era más fácil dejarla a la policía que hiciera lo que quisiera, y no involucrarse. Así estamos hoy, con esta situación. Hoy Binner está lanzando su candidatura en Mar del Plata, y nosotros acá, trabajando por la seguridad de los rosarinos”, chicaneó el funcionario nacional.

“Todo pasó porque cuando le advertimos la corrupción y la connivencia policial no quiso escucharnos, y optó seguir con la autogestión policial porque era más fácil y así terminó”.

Berni recordó que “hace un año exactamente la policía de Santa fe se declaró en huelga y Gendarmería tuvo que venir a garantizar” la pacificación, en alusión a la rebelión de un sector de la Unidad Regional II ocurrida en diciembre de 2013.

Cifras

Como si le respondiera a lo que un rato antes había dicho el diputado Maximiliano Pullaro, Berni puso en números las conclusiones de la misión que cumplieron sus hombres en Rosario, y la situación que vinieron a enfrentar. Hubo más de 260 homicidios dolosos en 2013, que en 2014 disminuyeron en 238, lo que llevó al funcionario K a atribuirse esa mejora. “Rosario y la ciudad de Santa Fe, quintuplican la media de homicidios dolosos en el país, por eso la decisión de ayudar a Bonfatti”, aseguró Berni, y agregó: “Cuando llegamos, la ciudad tenía cerca de 270 homicidios, y lo más difícil fue estabilizar la curva y luego bajarla”.

Según el secretario de Seguridad, en estos ocho meses la Gendarmería secuestró 600 armas, hubo 2500 detenidos, unas 350 causas abiertas por narcotráfico, cerca de 220 vehículos. “Hemos dado una pelea muy importante, no solo de la venta minorista sino que también en la elaboración de los laboratorios, recordemos el caso del Delfín Zacarías y su laboratorio. Por eso queríamos desarticular los laboratorios antes de desembarcar”, explicó.

En la ciudad quedarán entre 600 y 700 gendarmes correspondientes al escuadrón móvil Región 2 de Rosario, y estarán a cargo del nuevo jefe, el comandante general Roberto Benítez, que reemplazó a Omar Pereyra. .