Desde este miércoles, las líneas de colectivo que circulaban por calle Rioja, en el microcentro, pasarán a hacerlo por Santa Fe (102 N/R, 133 N/V, 142 N/R Y 145) y San Juan (123, 130, 138 y 139). La medida, que según la Municipalidad tiene como objetivo descomprimir el tránsito en una de las arterias, en realidad provocará una gran congestión en otra, según denunció el Observatorio Social del Transporte.

“Esta nueva medida profundiza lo actuado durante el año pasado cuando se eliminaron las últimas cuatro líneas que circulaban por calle Sarmiento y una por calle Mitre, trasladadas a las calles Entre Ríos, Maipú y Laprida, recargando el tráfico especialmente sobre esta última y quedando patente dicha afectación por las obras de repavimentación que se están ejecutando en el sector aledaño al Teatro ‘El Círculo’”, recalcaron.

En el Observatorio concluyeron que la reubicación de recorridos “calle Santa Fe -la más recargada de las arterias afectadas por esta nueva medida- se verá aún más congestionada con un promedio en hora pico de un ómnibus cada menos de 28 segundos”.

Para colmo, recordaron, se viene la construcción de un edificio dedicado a cocheras particulares en calle Santa Fe, entre Mitre y Entre Ríos. Y por situarse el mismo sobre la vereda de numeración par (norte) “traerá aparejado que el movimiento de ingreso y egreso de vehículos interferirá con la circulación del carril exclusivo del TUP allí establecido”.

Según el Observatorio, el incremento de casi 30% en la cantidad de servicios que circularán por Santa Fe provocará más demoras en las paradas por congestionamiento de unidades durante los ascensos y descensos de pasajeros.