El presidente Mauricio Macri presentará formalmente el proyecto de reforma electoral el próximo jueves en el Centro Cultural Kirchner (CCK), en el que impulsa la Boleta Unica Electrónica, luego de varias demoras y postergaciones y horas antes de que se someta a una cirugía en su rodilla. El objetivo es que se apruebe antes de septiembre y tener toda la logística lista para marzo del año que viene.

Tras seis meses de debate con partidos políticos, jueces, ONGs y legisladores, el proyecto -redactado por la Secretaría de Asuntos Políticos del Ministerio del Interior- será oficializado el jueves a las 10.30 en el auditorio del CCK con el presidente como único orador confirmado.

Además, la reforma electoral ingresará ese mismo día por mesa de entrada a la Cámara de Diputados para poner en marcha su tratamiento, ya que por los tiempos electorales, debe estar aprobada para septiembre próximo a más tardar.

La Casa Rosada tenía previsto oficializar el proyecto el 30 de mayo pasado pero los vaivenes sobre el contenido y los viajes presidenciales obligaron a su postergación. Uno de los factores que demoró la definición del borrador fue la posibilidad de incluir una reforma al sistema de primarias, convirtiéndolas en optativas y acotando el voto a un sólo frente electoral y evitar el sufragio por varias coaliciones en la misma elección.

Filtrada por el bloque de Cambiemos, la iniciativa fue resistida por el PJ y parte de la UCR, por lo que el proyecto se ceñirá a implantar la BUE, convertir en obligatorio el debate presidencial, anular la posibilidad de las listas colectoras, la coordinación de los comicios para evitar su realización desagregada y reforzar el rol de la Cámara Nacional Electoral en detrimento de la Dirección Nacional Electoral hasta que se legisle un instituto autónomo para 2019.

El Gobierno ya avanza en la fase más compleja del proceso, que es la aplicación, en la que intervendrá el ministro de Modernización, Andrés Ibarra, quien avanza en el estudio de cómo se llevará a la práctica la BUE, que requiere una puesta en marcha de 120 mil máquinas electrónicas.

Descartada la fabricación de las máquinas a nivel local y con el objetivo de tener toda la logística lista para marzo del año que viene, Ibarra ya analiza ofrecimientos de empresas de hardware y software y definirá los tiempos para la licitación a fines del mes próximo.