Hace cinco años, la Justicia provincial condenó a la Municipalidad de Rosario y le dio un año de plazo para que pusiera en marcha el cementerio de mascotas de la ciudad. Pero el tiempo pasó y como tal obra ni siquiera empezó, empezó a regir ya crecer el monto de la sanción económica que deberá pagar el municipio por no cumplir la ordenanza que dispone la creación del predio y de una guardería transitoria de mascotas.

En diciembre del año pasado el Concejo Municipal dio el visto bueno para que el cementerio y guardería para los animales sea emplazado en el Bosque de los Constituyentes, luego de un proyecto presentado por el concejal Carlos Cossia.

Pero hasta ahora no hay novedades respecto a la construcción. Por incumplir la ordenanza la Municipalidad ya pagó más de 100.000 pesos. Pero no es todo: como el tiempo transcurrió y la falta de cumplimiento se mantiene, el municipio tiene ahora una deuda superior a los 200.000 pesos, según la sanción diaria que impuso el juez Néstor García.

La Sala Cuarta de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial sostuvo que "el tema presupuestario no puede invocarse como excusa permanente para violentar intereses difusos de la comunidad que han sido reconocidos por la sanción de ordenanzas".

Además, le ordenó desmantelar un predio que ocupa el Instituto Municipal de Salud Animal en el distrito oeste, donde deriva perros y gatos, para reemplazarlo por una guardería transitoria que se ajuste a las normas ambientales.

En el 2010 entidades proteccionistas de animales presentaron una demanda de la Ley 10.000 de Intereses Difusos ante el incumplimiento del Estado municipal de la ordenanza de 1994, que regula la actividad y establece la creación de la necrópolis para mascotas, además de mejorar las condiciones sanitarias de los animales en tránsito.