Vecinos de barrio Las Flores que cortaban el ingreso a la autopista Rosario - Buenos Aires a la altura del puente de Circunvalación en reclamo por los daños que les dejó el último temporal fueron reprimidos por efectivos de la Policía santafesina. Según denunciaron, los agentes de la fuerza provincial desalojaron a los manifestantes con disparos de balas de goma. Algunas personas mostraron heridas en diferentes partes del cuerpo y debieron ser atendidas por personal de salud.

Los habitantes de Las Flores habían decidido cortar la avenida de Circunvalación tras no haber sido atendidos por el municipio este miércoles. Reclaman que, además de los problemas estructurales en el barrio, la última tormenta produjo grandes daños e incluso obligó a 13 familias a ser evacuadas en la  la vecinal “Nuestra Señora de Itatí”.

La concejala Celeste Lepratti estaba presente en el lugar acompañando el reclamo de los manifestantes. La edila denunció en diálogo con Sí 98.9 que los policías "pareciera que eligieron dispararle a las mujeres" y ejemplificó con una mujer embarazada que sufrió varias heridas de balas de goma en las piernas. "Lo peor es que todavía no apareció nadie acá a dar la cara".

En tanto, un vocero del Ministerio de Seguridad santafesino dijo a la agencia Télam que los vecinos “estaban cortando las dos manos” de la autopista y “se advirtió que le cobraban a todos los automovilistas que podían para pasar". “Es una mecánica que se ha repetido en otras oportunidades, a nosotros nos consta”, amplió el informante.

En esa línea, contó que “advertida la Policía de esa situación, fue a despejar para evitar esa situación de extorsión que no tiene nada que ver con lo que originó la protesta”. Según el vocero de la cartera de seguridad santafesina, en ese momento los vecinos “les arrojaron piedras a la policía y a los móviles, por lo que la policía despejó” la autopista con balas de goma.

A su tiempo, Lepratti había advertido que "la realidad que atraviesan los vecinos es desesperante, tristemente acostumbrados a vivir en el olvido, ahora le suman la falta de luminarias y cableado seguro, desmalezamiento, aguas contaminadas que generan focos infecciosos y por sobretodo la pérdida de sus pertenencias".

"El entorno es desolador para las más de 150 familias que viven con sus bebés, niños y abuelos, donde los pisos de tierra cubiertos de barro, alimañas de las más variadas especies, muebles deteriorados por la humedad y en los casos más extremos pérdida total de la vivienda", agregó la Concejala del Frente Social y Popular