El grupo terrorista Estado Islámico (EI) asumió la autoría del atentado de Manchester, y afirmó que un "soldado del califato" colocó "varios paquetes bomba" en el Manchester Arena en la homónima ciudad británica mientras había un espectáculo musical. 

En un comunicado cuya autoría no pudo ser comprobada y difundida a través de Telegram, el EI afirmó que detonó los paquetes colocados mientras cantaba la artista pop Ariana Grande, donde murieron al menos 22 personas, entre ellos varios niños, y resultaron heridas otras 59 personas.

Por su parte, la policía británica evacuó un concurrido centro comercial de la ciudad de Manchester y detuvo allí a una persona, sin que se conozca aún si guarda relación con el atentado. Según la fuerza policial, el atentado fue perpetuado por un solo atacante, el cual murió por la deflagración, pero siguen intentando determinar si actuó en solitario o recibió ayuda.

"Sabemos que un solo terrorista hizo estallar un artefacto casero cerca de una de las salidas del recinto, eligiendo deliberadamente el momento y el lugar para causar la mayor matanza", dijo la primera ministra británica Theresa May en Downing Street, antes de dirigirse a Manchester para reunirse con las autoridades.