La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, afirmó que "no habrá un recorte masivo" de pensiones para personas con discapacidad pero, lejos de bajar la tensión, advirtió que desde el gobierno están "combatiendo a las mafias que se quieran aprovechar" de las necesidades de esos sectores sociales.

Luego de la polémica medida de reflotar un decreto de hace 20 años que impone mayores requisitos para acceder a las prestaciones y generó el recorte de las mismas, la responsable del área respondió a las críticas y las vinculó con fines electorales.

“Quiero llevar tranquilidad a las familias que reciben una pensión porque la merecen y la necesitan. No vamos a hacer un recorte masivo. No hay intención de sacar las pensiones como se está tratando de hacer creer con fines políticos", afirmó la ministra.

La funcionaria resaltó que en los últimos meses realizaron denuncias contra "algunos médicos que cobraban certificados de pensión" y destacó que en "Guanaco Muerto, un pueblo de Córdoba, el 120 por ciento de la población" tenía esos subsidios. También dijo que en un pueblo de Formosa estaba "cerrada la oficina de pensiones pero se entregaban los certificados en un local partidario del Frente para la Victoria". 

Errorismo

En cuento a lo acontecido,  Stanley admitió que se cometieron errores pero deslindó responsabilidades. “Somos humanos y, lamentablemente, durante muchos años hubo desinformación y no se trabajó con los datos correctos, justamente para esconder el clientelismo", argumentó.

“Cuando uno va a borrando y cambiando los datos se pueden producir estos errores estamos haciendo una revisión caso por caso y se van a restablecer todas aquellas pensiones en las que hayamos cometidos errores". Además, se habilitó una línea telefónica de atención a través del número 0800-222-3294.