Los principales referentes del interbloque Cambiemos de la Cámara de Diputados analizaron con funcionarios del Poder Ejecutivo la posibilidad de sesionar el lunes para tratar el proyecto de reforma previsional, luego del escándalo en el recinto que frustró su tratamiento y una jornada violenta en los alrededores del Congreso. 

Para esto buscará ratificar el apoyo de los gobernadores que hace un mes acordaron avanzar en un acuerdo social y reformas laborales, tributarias y previsionales. Incluso fuentes de gobierno señalaron que este jueves se cursaron invitaciones a los gobernadores para que se desplacen a Buenos Aires a fin de mantener un eventual encuentro con el presidente Mauricio Macri.

La jornada se agitó a media tarde con la caída de la sesión que iba a tratar la reforma previsional por lo que cerca de la noche el gobierno pensó en avanzar con un decreto de necesidad y urgencia (DNU) para realizar los cambios en las jubilaciones y las asignaciones sociales. Finalmente se frenó. 

Ahora la opción es volver al Congreso el lunes. Para evitar sesionar el 19 y 20 de diciembre, por lo simbólico de la fecha en relación a lo sucedido en 2001, buscarán hacerlo el lunes 18 por la tarde.

Desde el oficialismo buscarán que antes de esa sesión, posiblemente el lunes por la mañana, los gobernadores que firmaron el acuerdo que derivó en la elaboración de este proyecto, entre otros, avalen públicamente el texto y comprometan la asistencia de sus diputados y el voto a favor.

Para convencer a quienes dudaron de aprobar el texto original, desde el oficialismo no descartan la posibilidad de efectuar una reasignación presupuestaria para compensar la pérdida que los jubilados sufrirían en marzo como consecuencia del empalme de ambos sistemas de movilidad previsional.