Los siete jóvenes de la provincia de Santa Fe que fueron internados en la comunidad terapéutica contra las drogas San Camilo regresaron después del revuelo que generaron las denuncias públicas de organismos de derechos humanos por maltratos. En ese contexto, las madres de dos jóvenes internos iniciaron una causa penal.

Cinco de los jóvenes que retornaron son rosarinos, uno de Venado Tuerto y otro de Rafaela, De todos ellos, cuatro se encuentran actualmente internados en instituciones de rehabilitación en Rosario, mientras que el resto volvió a sus hogares por decisión familiar, aunque con seguimiento.

Los jóvenes que pasaron por San Camilo para una recuperación de adicciones fueron reclamados por la Dirección Provincial de Niñez a principios de julio luego de quejas de sus padres por “prácticas carcelarias”. La directora de Niñez, Claudia Aguilera, aseguró a Rosarioplus.com que “sus familiares y nuestros equipos técnicos viajaban cada 15 días a visitar y monitorearlos, y nunca hubo queja alguna de ellos ni sus padres”.

Sin embargo la semana pasada, tras retornar los chicos a la provincia, dos madres decidieron realizar una denuncia penal contra la Dirección Provincial de Niñez por haberlos ingresado al predio donde. segúin las denunciantes, sufrieron “sometimiento a torturas. castigos crueles y degradantes, sobremedicación, aislamiento, sujeción física y mecánica, y encierros prolongados, no tienen agua caliente ni frazadas para pasar la noche” .

Consultada Aguilera por la situación actual de los siete jóvenes, aseguró que “están todos bien y contenidos, ya que ninguno nos transmitió haber sido víctima de lo que se denuncia. Tres de ellos volvieron a sus senos familiares y cuatro se encuentran ahora internados en otras instituciones privadas de rehabilitación".

Sobre la denuncia penal que ahora pesa sobre la Dirección qu encabeza, explicó que “ya se llevó toda la documentación al Ministerio Público de la Acusación así como a la Defensoría de la Niñez, ya que cada visita y entrevista se encuentra registrada”.

La funcionaria de Niñez y Adolescencia precisó que "ante tanta incertidumbre y el reclamo de los padres los trajimos de vuelta, aunque las entrevistas con los chicos eran constantes con nuestros psicólogos, abogados y trabajadores sociales y nunca les dijeron haber sufrido maltratos. La Justicia porteña investigará a la institución de Pilar y se verá cuánto hay de cierto en las denuncias, porque hasta ahora no está probado”.

Finalmente Aguilera recordó que la Dirección tomó conocimiento del reclamo el pasado 30 de junio cuando los familiares realizaron la habitual visita: “Uno de nuestros profesionales nos manifestó que los padres estaban disconformes y que querían volver, por lo que el martes siguiente los trajimos a todos”.