Así como en Rosario varios cientos de personas se congregaron en el Monumento Nacional a la Bandera para participar del Tetazo para reclamar y reivindicar la igualdad de género, luego de la polémica que se encendió con el destape y posterior expulsión de un grupo de mujeres en un balneario de Necochea, varias ciudades del país se sumaron a la movida autoconvocada.

Centenares de mujeres se manifestaron en el Obelisco de Buenos Aires para pedir por la "soberanía" sobre el propio cuerpo y reclamar un cambio cultural para no ser consideradas un objeto, en una protesta convocada tras un polémico operativo policial contra tres jóvenes que hicieron topples en una playa de Necochea. "Lo que pedimos es que haya un cambio de cultura, que se tire abajo la construcción violenta que existe sobre el cuerpo de la mujer. Lo que pasó en Necochea fue sólo un disparador, pero nosotras siempre militamos porque deje de tomarse a la mujer como un objeto", dijo a Télam Lola Cufre, una de las organizadoras de la protesta, convocada por organizaciones feministas agrupadas en el colectivo "Agitaciones Contra el Acoso Callejero".

En la ciudad de Córdoba, la manifestación fue protagonizada por organizaciones sociales, políticas, estudiantiles y autoconvocadas y se realizó frente al Patio Olmos, en la zona céntrica. La representante de la organización Piqueteras Córdoba, Valeria Díaz, aseguró que la resolución del juez de Necochea Mario Juliano de no condenar a tres mujeres por mostrar sus pechos "es una respuesta muy contundente, muy clara al respecto. De hecho esperamos que se viralice el dictamen del magistrado porque todavía hay abogados que siguen repitiendo que es ilegal o que el toples está fuera de la ley", manifestó.

En Mar del Plata, en tanto, mujeres y varones se sumaron  al Tetazo que se organizó en la playa ubicada en la calle Río Negro y la costa. La organización de mujeres marplatenses "Mirabal" organizó este topples en la playa, en la que madres con hijos, abuelas, jóvenes y adolescentes clavaron en la arena pancartas que decían: "Nuestros senos no deben ser censurados". También se vieron carteles con las inscripciones "Igualdad", "La única teta que molesta es la que no se puede comprar", "En tetas nos queremos", "Tetas sí..Ratis no" y "Mi cuerpo es mío y no de tu prejuicio".