Los centros de estudiantes de las facultades de Medicina, Ciencia Política, Humanidades y Psicología de la Universidad Nacional de Rosario protagonizaron este jueves una jornada de lucha que incluyó una clase pública, marchas y concentración frente a Rectorado. Entre los reclamos, resaltaron la necesidad de poder tener condiciones edilicias dignas a la hora de estudiar. Y tras una audiencia lograron avanzar con un punto clave: autoridades universitarias confirmaron las obras para reacondicionar las cinco aulas de Psicología clausuradas desde el verano por la caída de un techo.

La presidenta del Centro de Estudiantes de Psicología Maira Lignetti confirmó a Rosarioplus.com la buena noticia tras reunirse con el secretario general de la UNR Mariano Balla. "Este viernes comenzarán las refacciones edilicias del segundo piso de la facultad, y la semana que viene durante el paro docente se avanzará en las obras y se espera que terminen en la misma semana o la siguiente”, precisó.

El reclamo por estas obras no fue el único tema que impulsó la jornada de lucha de este jueves, pero sí el que obtuvo respuesta. Otro eje de debate entre los presidentes de los centros y el secretario general fue la situación edilicia de Medicina, Enfermería, Ciencia Política y en particular Humanidades.

“Nos manifestó que el presupuesto debería alcanzar para las obras en cada facultad. Parece que niega la realidad que vivimos todos los días quienes cursamos”, lamentó Lignetti, frente a la asamblea de estudiantes en el hall central.

Balla se comprometió a que las autoridades universitarias presenten a fin de año un balance público que justifique los gastos de los 45 millones de pesos de la partida presupuestaria que se aprobó en diciembre pasado.

La movida de este jueves concentró a unos 300 estudiantes de diferentes carreras, quienes además de reclamar la emergencia edilicia, se manifestaron contra el "vaciamiento presupuestario" y a favor de un salario docente digno. 

Mal estado

Los estudiantes de Psicología venían reclamando desde antes del inicio del año lectivo por las malas condiciones del edificio que s encuentra en La Siberia.  Las tormentas del verano provocaron daños que obligaban a una pronta intervención y el Centro de Estudiantes denunció públicamente la situación, pero el tiempo pasó y poco se reparó. Hace algunos días, desde el Centro de Estudiantes habían denunciado que eran cinco las aulas inhabilitadas, que sumado a cátedras superpobladas, obligó a algunos docentes a dar clases al aire libre.