Si de números se trata, la victoria de Mauricio Macri a nivel nacional se explica por la ventaja que sacó en el centro del país. El presidente electo se quedó con nueve provincias mientras que Scioli ganó las quince restantes. La diferencia en territorios como Córdoba o la Ciudad de Buenos Aires fue la clave.

El color amarillo del PRO tiñó el área central que incluye a varias de las provincias más densamente pobladas como Santa Fe y Córdoba, entre otras. 

Mientras que el “azul” del Frente Para la Victoria, con su candidato Daniel Scioli, cubrió las provincias patagónicas y también las del norte del país, a excepción de Jujuy, que quedó amarilla. 

El candidato oficialista ganó más provincias pero no le alcanzó. Daniel Scioli se impuso en 14 provincias argentinas (Buenos Aires, Catamarca, Corrientes, Chaco, Chubut, Formosa, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, San Juan, Santa Cruz, Santiago del Estero, Tucumán y Tierra del Fuego) ), mientras que el candidato por Cambiemos, Mauricio Macri, triunfó en 10 (Córdoba, Entre Ríos, Mendoza, La Rioja, La Pampa, Jujuy, Ciudad de Buenos Aires, San Luis y Santa Fe).