El joven asesinado este amanecer, como desenlace de una pelea en el after Child, de Maipú al 1100, había estado detenido y acusado de ser uno de los pistoleros que el año pasado atentó contra el Club Defensores de América, en el barrio Parque Casas, durante una práctica de fútbol infantil a la que asistían muchos niños, y estaba relacionado con uno de los involucrados en el atentado a la casa del ex gobernador Antonio Bonfatti, en 2013.

Fuentes de la Fiscalía Regional informaron que Vladimir Medina, de 20 años, es quien este viernes a las 5 de la mañana fue alcanzado por al menos tres disparos cuando escapaba del bar en el que se había desatado una discusión con disparos incluidos. Corrió malherido y sangrante por la vereda y se desplomó en la ochava de Maipú y San Juan. Tres horas después, murió en el Hospital Clemente Alvarez.

Los voceros relacionaron su nombre con aquella violenta intimidación contra el club barrial situado en avenida Casiano Casas y Washington. El 30 de marzo de 2016, al atardecer, mientras unos cuarenta niños asistían a una práctica de fútbol, una ráfaga de disparos se abatió sobre el humilde edificio de la institución. Más allá del espanto que causó la situación, el tiroteo sólo causó heridas leves en dos niños. Por aquellos días, la versión que circuló explicaba semejante ataque a la intención de una banda de narcotraficantes de correr a socios y dirigentes, y hacer pie en el club hasta tomarlo como base de operaciones para la venta de estupefacientes.

Medina había sido detenido un mes más tarde por ese hecho, y seguía imputado aunque en libertad. Asimismo, las fuentes consultadas vincularon a este joven con Ema Pimpi Sandoval, condenado como instigador del atentado a tiros contra la casa de Bonfatti, en octubre de 2013. Sandoval actualmente también está libre.