La Justicia accedió este jueves a imputar, tal como pidió la fiscal Marisol Fabbro, a una mujer del delito de "homicidio agravado por el vínculo en grado de tentativa" contra su propio hijo, y la dejó en prisión preventiva, del mismo modo que procedió contra su actual pareja. Se trata del caso ocurrido el martes por la noche en la vivienda de Paraguay 6411, extremo sur de Rosario.

En audiencia imputativa, Natalia R. y Sergio G. fueron conminados a cumplir prisión preventiva hasta el juicio oral, por haber provocado el trágico desenlace por el cual hoy el hijo de ella, Dylan G., de 14 años, pelea por su vida en el Hospital de Niños, Víctor J. Vilela. El balazo que el chico recibió en la cabeza partió de un arma presentamente disparada por la pareja, que fue hasta la vivienda donde estaba la víctima y su padre. En el fragor de una pelea verbal, alguien esgrimió una pistola y abrió fuego. 

La vicedirectora del centro médico, Carolina Binner, estimó que “el chico se encuentra estable y sin complicaciones luego de una neurocirugía, aunque aún en estado crítico”. El proyectil ingresó en la zona frontal del cráneo.

En diálogo con Rosarioplus.com, Binner detalló que "el chico ingresó intubado, se le hizo una tomografía, y rápidamente fue operado, y afortunadamente se encuentra compensado hemodinámicamente, aunque continúa sedado e intubado, atravesando las horas más críticas para su recuperación".

Dylan G. estaba el martes a las 23.30 en su casa de Paraguay al 6400 con su papá, cuando llegó su mamá, acompañada por Sergio G., su actual pareja. Surgió una agria pelea que de los reproches e insultos pasó a mayores, y que terminó con el balazo que atravesó el cráneo del adolescente.

Pese a lo estremecedor de la herida, fuentes del hospital pediátrico valoraron que el proyectil no quedara alojado en el cerebro, porque eso hubiera perjudicado la evolución del paciente. No obstante, admitieron que el estado del chico es delicado.