El gobernador Miguel Lifschitz reveló un poco más acerca de la reformulación del Frente Progresista que ha vuelto a proponer, sobre todo desde la derrota en la elección de diputados nacionales. Sin embargo, el socialista prefiere mirar la mitad llena del vaso: dejar a un lado el mensaje de los santafesinos para el Congreso y quedarse con el resultado de las elecciones de nivel local, esto es a intendentes, presidentes comunales y concejales. “Menos Rosario, el Frente Progresista se impuso en las elecciones locales, dejó al peronismo en segundo lugar y a Cambiemos, muy lejos, en el tercero”, destacó el mandatario.

Pero la tendencia para el oficialismo santafesino pinta malos augurios de elección en elección. Por eso es que el mismo domingo a la noche el secretario general del Partido Socialista en la provincia volvió con la necesidad de abrir el juego e invitar a nuevos socios a la coalición que gobierna la Bota desde 2007.

“Si dejamos todo como está, probablemente los (malos) resultados se consoliden. Habrá que hacer una apertura del Frente, sumar a otros referentes y sectores, pensar en un Frente más amplio, que mantenga identidad pero que sea más abarcativo, plural, con organizaciones sociales. Un carácter más movimientista que partidario. Hoy los formatos políticos cada vez son más eclécticos y abiertos y no necesariamente responden a organizaciones partidarias estructuradas. Debemos avanzar en ese camino, profundizar la gestión porque la valoración es en general muy positiva en todas partes y cómo logramos unificar una mirada de la ciudadanía respecto de la gestión y de los representantes en las elecciones”, explicó Lifschitz en Sí98.9.

En cuanto a las elecciones, el gobernador se apoyó el hecho de que de los 55 municipios en donde se eligieron concejales, el FPCS ganó en 22 (entre ellas, Santa Fe, Venado Tuerto y Villa Gobernador Gálvez), mientras que en 15 ganó Cambiemos, en 13 triunfó el Frente Justicialista y en otros 5 lo hicieron listas vecinales.

Por otra parte, de las doce ciudades que votaron intendente, seis quedaron en manos de candidatos del FPCS, cuatro de las cuales son nuevas para esa fuerza: San José del Rincón, Suardi, Romang y Recreo.  Y de las 308 comunas que celebraron comicios, el FPCS ganó en 160.

Lifschitz se declaró conforme con su gabinete, pero ratificó que habrá cambios: algunos, obligados en el caso de los ministros que deberán asumir cargos legislativos: el de Producción, porque Luis Contigiani fue electo diputado; y el de Salud, porque Miguel González reemplazará a Emilio Jatón como senador del departamento La Capital. Pero habrá más: no quiso referirse a si Maximiliano Pullaro dejará la cartera de Seguridad, pero sí insinuó que el de Obras Públicas, Julio Schneider, y el de Ciencia y Tecnología, Eduardo Matozo, tienen las horas contadas en el gobierno.

“Vamos a hacer algún otro cambio, poner más energía en algunas áreas. Conversamos también con los dos ministros que responden al sector de Corral que se plegó a Cambiemos, dos buenos ministros, excelentes personas, prestigiosas, pero debemos poner en sintonía la gestión con la política”, adelantó en referencia a aquellos dos.

Por otra parte, volvió a la carga con la intención de convocar a la reforma de la Constitución provincial para los primeros meses de 2018. “Creo que es una buena oportunidad, esto siempre genera temores a perder algún beneficio o privilegio en algunos, que alguien se beneficie con ese proceso y entonces se termina invalidando, como ya ocurrió varias veces. Yo retomaré el tema hasta que tenga energía política. Tenemos de acá fin de año y los primeros meses del año próximo, y si no quedará para otra vez como tantas veces. La reelección no debe ser una excusa para no avanzar, hay consenso para ponerle algún límite a la reelección indefinida y que cada gobernador tenga la posibilidad de una reelección. Lo que se discute es si eso le cabe al actual o no. Yo no pondré ningún obstáculo para que eso sea la piedra en el zapato. Hablemos y veremos cuántos puntos ponemos de acuerdo”, concluyó el gobernador.