La fiscal Valeria Piazza Iglesias reveló que el origen de la explosión de la semana pasada en Balcarce 23 bis estuvo en el acto de encender un fósforo, a cargo del mismo hombre que se convirtió en la única víctima fatal de la tragedia: Alejandro Bogado, de 60 años.

La funcionaria judicial le tomó declaración testimonial este lunes por la mañana a la paramédica que fue la primera en asistir a Bogado aquella tarde del 23 de marzo, cuando la cuadra de Balcarce entre Güemes y Brown se estremeció por un estallido. Y la mujer contó que Bogado, todavía consciente y con quemaduras en el 70 por ciento del cuerpo, le había referido que había estado durmiendo la siesta, que se levantó para hacerse un té, y que en el acto de encender una hornalla de su cocina sintió el estrepitoso fogonazo que derrumbó su departamento, el del vecino y el colapso del techo y de una pared medianera. 

Dijo Piazza Iglesias que Bogado le dijo a la paramédica que lo auxiliaba "que nunca sintió olor a gas, porque ella se lo preguntó". Y que luego en el hospital Clemente Alvarez fue inducido al coma debido a la gravedad de las lesiones que había sufrido. Así estuvo hasta la semana pasada, cuando falleció.

La fiscal encargó a la Universidad Tecnológica Nacional la realización de otro peritaje sobre el inmueble deflagrado. Para ello, avisó a la Municipalidad que no procedan con la demolición hasta que ella no haya concluido con los peritajes requeridos. En función de ello, evalúa la posibilidad de cambiar la calificación de la causa. 

Por último, Piazza Iglesias halló similitud en ese relato con el de otros vecinos del consorcio que declararon antes: "Este hombre y vecinos y otros propietarios manifestaron que no sintieron olor  a gas en el edificio, pese a que el informe de Bomberos determinó que sí hubo acumulación de gas".