El 2016 será recordado por haber sido uno de los años más mortíferos en lo que a personas reconocidas se refiere. Desde representantes del arte y la música como David Bowie o George Michael hasta figuras políticas e históricas como Fidel Castro, fueron muchos los nombres reconocidos que engrosaron la lista del pasado año.

Pero cuidado, no suelten el pañuelo porque parece que 2017 será aún más negro. Al menos así lo dice un informe realizado por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), que asegura que este año que recién empezó “matará” a más famosos que el pasado.

El dato concreto se demuestra a partir de un hecho fáctico que muchos medios de comunicación expresaron: contando las cifras ofrecidas por los más importantes del mundo, hubo un 30% más de obituarios respecto de 2015.

Para el estudio, C. Candia-Castro-Vallejos, Cristian Jara-Figueroa y César A. Hidalgo, del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), armaron listas de famosos según diferentes parámetros: consideraron una celebrity a los que aparecen en Wikipedia en 20 o más idiomas, y pusieron en el estatus de superestrella a los nombrados en más de 70 lenguas. David Bowie, por ejemplo, aparece en 104.

Los resultados indicaron que en 2016 murieron 16 superestrellas, casi el doble de las 9 que fallecieron en 2015. El número de celebrities también aumentó en igual proporción.

Y si se tiene en cuenta que la cantidad de famosos aumenta año a año, la cantidad de famosos muertos también se incrementará de la misma manera. Es decir, todo se explica con algo tan común y mundano como la edad y la masificación de los medios de comunicación de los últimos 50 años.

Al final de la década del ’50 y principio de la del ’60, la expansión de la radio, el cine y especialmente de la televisión aumentó considerablemente la cantidad de miembros de la farándula de cada país.

A medida que pasaron los años, muchos de esos famosos locales fueron adquiriendo más fama, por lo que trascendió las fronteras y popularizaron sus figuras en otros lugares. Ahora, esa primera generación de famosos llegó a la vejez, y como el lógico ciclo de la vida es el que manda, muchos se van despidiendo de ella.

Pero según esta teoría, no hay que preocuparse porque siempre quedarán famosos a los que seguir.