La búsqueda de la libertad da para idear escapes insólitos. De los creadores de Prison Break, donde el protagonista se tatuaba el plano de la cárcel para poder escapar, llega esta historia que se ubica en un puesto algo más precario.

Se trata de un preso de una cárcel de Río Negro que intentó escapar escondido en un cochecito de bebé, pero fue descubierto por los guardias de la prisión. El insólito hecho ocurrió este fin de semana en el Penal Nº 1 de la ciudad de Viedma, donde llegó una pareja con un bebé en un cochecito para visitar al reo que intentó huir.

Cuando se iban a marchar, el hombre y la mujer lo hicieron de manera sospechosa por lo que al ser consultados por el personal de guardia se pusieron nerviosos, según informó el diario Río Negro en base a fuentes policiales.

Y cuando estaban saliendo el penal, una de las ruedas del carrito se trabó sobre el piso de tierra y allí los guardias vieron que dentro del cochecito estaba escondido el interno, conocido por varios hechos delictivos como el violento robo a un anciano y una posterior huida de la que fue recapturado en inmediaciones de la ciudad bonaerense de Miramar.