Los auriazules entrenaron este miércoles por la mañana en el predio de Arroyo Seco. La novedad saliente del ensayo tuvo como protagonista a José Luis Fernández. El volante, que había trabajado diferenciado desde el inicio de la semana, se sumó al grupo con sus compañeros. Así, el zurdo ex Godoy Cruz de Mendoza despejó cualquier duda sobre su presencia en el juego del domingo ante Newell’s. En tanto que Walter Montoya, que se repone de un problema ligamentario en la rodilla derecha, sigue evolucionando favorablemente. Pero todavía no se sabe si se recuperará a tiempo como para ser tenido en cuenta por Coudet de cara al Clásico.

El sábado pasado, jugando ante Estudiantes de La Plata, Fernández había sufrido un fuerte traumatismo en el empeine izquierdo. Y también había finalizado el encuentro con una sobrecarga en el sóleo derecho. Por esta razón, el mediocampista trabajó en forma diferenciada durante las prácticas desarrolladas los días lunes y martes. Pero las dolencias quedaron atrás, y este miércoles fue exigido a la par de los demás.

En cuanto a Montoya, que ante el Pincha padeció la distensión del ligamento lateral de la rodilla derecha, este miércoles cumplió tareas aeróbicas en campo. Y si bien su evolución es favorable, la lesión que sufrió el chaqueño habitualmente requiere entre 10 y 20 días para recuperarla. De todos modos, el volante será exigido el viernes. Recién entonces, según la respuesta que entregue Montoya, se sabrá si el Chacho lo podrá contar para el partido del domingo ante la Lepra.

El plantel volverá a entrenar este jueves por la tarde, nuevamente en el country de Arroyo Seco. Allí habrá un ensayo de fútbol a puerta cerrada. Y, seguramente, se verán las primeras señales del once que tiene en mente Coudet para recibir a Newell’s en Arroyito.