El Real Madrid se proclamó campeón de Liga. Fue la primera de Zinedine Zidane, gracias a los goles de Cristiano Ronaldo y Karim Benzema en La Rosaleda, ante un Málaga que nunca especuló (0-2).

El Merengue cerró su gran Liga con actitud, cumpliendo el mensaje preferido de Zidane: salir con intensidad para evitar sufrimientos y nerviosismo. Marcando pronto para superar récords propios, marcando goles en todas las jornadas y obteniendo más puntos a domicilio que en el Santiago Bernabéu.

Todo estaba en la mano de los madridistas que no iban a dejar escapar el gran objetivo marcado a inicio de curso. Necesitaron solo dos minutos para quitar la emoción. Un error en el despeje de Luis Hernández se convirtió en peligro cuando el balón le cayó a Isco, en estado de gracia. Su visión al espacio dejó solo a Cristiano Ronaldo, que superó con facilidad la salida de Kameni y volvió a marcar un tanto decisivo. Su número 25 en Liga, el 40 de la temporada con un final perfecto fruto del descanso medido.

Casemiro sin cansarse de robar, Isco de construir, Kroos de aparecer con llegada, fueron constantes del juego de este domingo. En tres ocasiones el Madrid buscó el gol pero se topó con Kameni. Benzema lo acariciaba con un disparo cruzado en una de sus pocas apariciones, y en contra de Isco, buscaba el remate de Cristiano para la sentencia, pero nuevamente respondía bien el camerunés.

La Liga ya era de un equipo que lidera Zidane. El campeonato de los goles salvadores de Ramos, la magia de Isco y la pegada como nueve de Cristiano.