El entrenador Diego Osella recibió este martes la noticia de otra baja dentro del plantel. Es que Mauro Matos le comunicó al DT rojinegro que no quiere seguir en el club y que buscará la manera de rescindir su contrato, que vence en junio. El delantero no tuvo demasiado rodaje en el último semestre: un accidente apenas llegó a Rosario lo relegó durante un tiempo, y después sufrió una tendinosis que lo tuvo fuera de competencia por un par de meses. Pero estaba claro que para Osella era una alternativa a Ignacio Scocco. De todas formas, el técnico confiaba en poder recuperar al 9 desde lo físico y lo tenía en sus planes para la segunda parte del campeonato. Sin embargo, Matos le avisó que no pretende seguir en Newell's. 

Si esto se confirma, la CD aguardará por la respuesta de AFA respecto a la posibilidad de conseguir un tercer cupo por la lesión de Mauricio Tevez, quien fue operado de la fractura del quinto metatarsiano y tendrá entre tres y cuatro meses de recuperación. Si la Lepra consigue un cupo extra, posiblemente se busque un lateral derecho (José San Román es el apuntado) y un delantero para ocupar las vacantes de Matos y Tevez. El tema es que si desde AFA le niegan esa posibilidad, la dirigencia deberá optar entre un defensor o un atacante para sumar al plantel.

Mansilla ya está

Hasta entonces, era un buen comienzo de año para Osella, ya que a horas de comenzar la pretemporada, concretó su primer refuerzo: Jacobo Mansilla, quien este martes firmó su llegada a Newell's a préstamo hasta el 30 de junio de 2018 y con una opción de compra de 400 mil dólares. El volante fue el primer jugador en el que el DT leproso pensó consumado el retiro de Diego Mateo. Y volverá a tenerlo a su disposición por tercera vez en su carrera, ya que lo dirigió en Colón y en Olimpo. Mansilla se sumará al arranque de la pretemporada el miércoles en Bella Vista y el fin de semana formará parte de la delegación que viaje a Mar del Plata para continuar con la parte más exigente de la preparación. 

Para Osella, Mansilla puede jugar como volante interno (no es un cinco de contención como Mateo) o como carrilero por izquierda, una posición en la que generalmente juega Maxi Rodríguez y en la que Eugenio Isnaldo, cuya situación aún no está definida, es una opción.

El juvenil rojinegro se encuentra en una encrucijada. Mientras los directivos leprosos intentan renovar su vínculo que vencerá el 30 de junio, sus representantes ya avisaron que no tienen intenciones de extender el contrato porque la idea es que salga ya, sea mediante una venta ahora, o en seis meses con el pase en su poder. Y aunque desde la CD sostuvieron que no lo van a "colgar", aún no está definido que viaje a la pretemporada.