Tal y como se pronosticaba, comienza un fin de semana de altas temperaturas, ya con 25 grados en las primeras horas tras la salida del rey sol, y con una máxima de 33 grados.

El Servicio Meteorológico envió un alerta a la población por la ola de calor que ya cubre la ciudad y alrededores, con un alerta amarillo, que es de un nivel intermedio de peligrosidad, y la clave del día, afuera o adentro, es tomar mucha agua.

Desde el servicio recordaron que “las olas de calor pueden ser peligrosas, especialmente para los bebes y niños pequeños, personas mayores de 65 años o aquellos con enfermedades crónicas”.