El humo y el olor a quemado producto de los incendios en las islas del Delta del Paraná se mostraron impactantes. El principal foco de incendio se produce entre las ciudades bonaerenses de San Nicolás y Ramallo, y llegó a la Ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, si cambia el viento al caer la noche podría inundar a Rosario. 

El responsable del Observatorio Ambiental de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Matías De Bueno, explicó que “el de San Nicolás es un incendio de unas 2.500 hectáreas aproximadamente, esa zona no ha tenido paz en los últimos meses”.

Tweet de Vanessa Balchunas

Como consecuencia del viento, el humo de los incendios que se producen en la zona de islas frente a las localidades del norte bonaerense llegó hasta la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano. De Bueno explicó que también se registraron focos ígneos en el delta del río Paraná frente a la ciudad santafesina de Rosario, pero de menor cuantía. 

El titular del Observatorio Ambiental de la UNR agregó que, de acuerdo al pronóstico meteorológico, este jueves podría producirse una rotación del viento, desde el sur. “Si se controlan (los focos) tal vez no haya problemas en Rosario, pero si cambia el viento, el jueves podemos tener algo de humo en la ciudad, proveniente de ese sector”, agregó De Bueno. Efectivamente el viento comenzó a soplar desde el sur. 

Tweet de El Economista

Las reiteradas quemas de pastizales en campos ubicados en las islas del Paraná vienen afectando a los habitantes de Rosario, ciudades del norte bonaerense y entrerrianas desde hace varios meses por el humo y fuerte olor a quemado. Esta situación despertó el fuerte malestar de ambientalistas e intendentes. En el medio se cajoneó el proyecto de Ley de Humedales.